Beneficios de los ácidos grasos poliinsaturados

Un grupo de investigadores de la Universitat Autònoma de Barcelona, presenta un artículo en el último número del Journal of Alzheimer’s Disease, alrededor de los efectos pro-neurogènics de una dieta rica en polifenols y ácidos grasos poliinsaturados https://cailapares.com/acidos-grasos-poliinsaturados/ (dieta LMN, en el acrónimo inglés). Tony Valente y colaboradores consideran que la dieta LMN “podría tener un efecto importante para combatir el declive de la función cognitiva” asociado al envejecimiento normal y a patologías neurodegeneratives como la enfermedad de Alzheimer.

Localización del hipocampo en el cerebro humano adulto. Su papel en la memoria a largo plazo y el hecho que sea una de las zonas donde hay generación de nuevas neuronas a lo largo de la vida adulta, lo hacen foco de numerosas investigaciones.

Neurogènesi en el cerebro adulto

En los libros de texto leemos todavía, y con buena razón, que las neuronas, en el cerebro adulto, son insustituibles. Que, en definitiva, las neuronas perdidas en el trasiego normal o, en condiciones patológicas, no son sustituidas. O dedo de otro modo, que todas las neuronas son producidas durante la etapa embrionaria. Cómo toda norma general, también esta tiene su excepción. Hay algunas áreas del cerebro adulto donde se forman nuevas neuronas de manera continuada. Es el caso de la zona subventricular (SVZ) de los ventrículos laterales y de la zona subgranular (SGZ) del giro dentado del hipocampo.

Pero incluso en estas excepciones, la edad es implacable. Y la misma tasa de forma neuronal (neurogènesi) de la SVZ y de la SGZ disminuye a medida que se envejece. Y quien dice se dice ratón. La neurogènesi del cerebro adulto por otro lado también un interés en enfermedades neurodegeneratives, bien desde un punto de mira patológico (una deficiente neurogènesi en la SGZ podría afectar el mantenimiento de las funciones cognitivas) bien desde un punto de mira terapéutico (la neurogènesi inducida podría ser, a medio o largo plazo, un tratamiento de algunas de estas enfermedades).

Un modelo de ratón para ensayar una dieta rica en polifenols y ácidos grasos poliinsaturats

Valente et. al. sometieran dos grupos de ratones a dos dietas diferentes, una de ellas rica en polifenols y ácidos grasos poliinsaturats (LMN). Ni los polifenols ni los ácidos grasos poliinsaturats forman parte de los nutrientes insustituibles de los ratones (ni de los humanos), y no son muy tenidos en cuenta en la confección industrial de piensos de ratón (ni de humanos). Sin embargo, tanto los polifenols como los ácidos grasos poliinsaturats hacen parte de una alimentación más sana, que va más allá de la pura subsistencia.

La neurogènesi en los ratones alimentados con la dieta LMN

Para reseguir la neurogènesi, los autores administraron aparte de los ratones de uno y el otro grupo BrdU y PCNA, unos marcadores que se asimilarían a ácidos nucleicos de nueva síntesis, y que por lo tanto marcarían las células que proliferaran después de la administración de estos marcadores. Después de sacrificar estos ratones, y hacer unos análisis histològiques de los cerebros, los autores encontraban que tanto en la SVZ como en la SGZ el marcaje con BrdU y PCNA era más pronunciado en los ratones con la dieta LMN. Mediante varias técnicas immunohistoquímiques (para detectar la presencia de DCX en el caso de las neuronas indiferenciades, y tirosin-hidroxilasa, calretinina y calbindina en las neuronas diferenciadas o maduras) los autores encontraban que el efecto de la dieta LMN se manifestaba en los dos niveles.

Cómo actúan polifenols y ácidos grasos poliinsaturats?

Para estudiar por qué mecanismo molecular estos componentes de la dieta estimulan la neurogènesi, Valente et. al. pasan del modelo de animal entero a un modelo de cultivo celular. Concretamente, trabajan con neuronas aisladas de rata.

Los autores expusieron estas neuronas en cultivo a dos agentes lesivos, que consideran relevantes:
– el peróxido de hidrógeno (H2O2), que es un subproducto normal del metabolismo del oxígeno, y que a su vez es un generador de radical OH•, que se considera uno de los elementos promotores del envejecimiento normal del organismo.
– el péptido Aβ1-42, péptido amiloide, es uno de los componentes de las placas que se acumulan encima de las neuronas, disparo distintivo de la malatia de Alzheimer.

En los dos casos, una crema rica en polifenols y ácidos grasos poliinsaturats, en relación a una crema que no los presenta, tiene un efecto protector en los cultivos neuronales. Principalmente, el efecto global de polifenols y ácidos grasos poliinsaturats es antioxidante.

Valente et. al. suponen que es justamente así como actuaría la dieta LMN en los ratones. El metabolismo normal del ratón genera unos productos tóxicos (radicales libras de oxígeno, etc.), que son contrarrestados por los polifenols y ácidos grasos poliinsaturats que, procedentes de la dieta, se acumulan los tejidos. No hay duda que la cosa es más compleja. Los ácidos grasos poliinsaturats procedentes de la dieta (bien de origen vegetal o bien de origen marino – pescado, etc.) se integran en el metabolismo general y participan tanto en elementos estructurales (membranas celulares, etc.) cómo funcionales (hacen de sustratos a la producción de eicosanoides), de forma que generan toda una serie de efectos moleculares, algunos de ellos contradictorios.

Los polifenols, por otro lado, no son meramente un elemento antioxidante, sino que también producen interacciones más específicas. En todo caso, el efecto global de unos y otros es positivo. O, si lo decimos de otro modo, su ausencia o presencia escasa en la dieta sería negativa. Profundizar todavía más en los mecanismos de acción de la preservación de la neurogènesi, así como analizar si también son efectivos si se los administra de forma más tardía (en ratones de edad más avance) son las tareas pendientes en las cuales el grupo de investigación de Mercedes Unzeta seguro que ya trabaja.