Primeros síntomas y tratamiento del Alzheimer

Cada persona es única y el alzheimer las afecta de manera diferente, por ello dos personas no tendrían síntomas que se desarrollen exactamente de la misma manera. La personalidad de un individuo, la salud general y la situación social son factores importantes para determinar el impacto de la demencia en él o ella.

Síntomas tempranos y tratamiento del alzheimer

Los síntomas varían entre la enfermedad de Alzheimer y otros tipos de demencia, pero hay grandes similitudes entre todos ellos. Los signos más comunes son la pérdida de memoria y la pérdida de habilidades prácticas, que pueden conducir a la retirada del trabajo o actividades sociales.

Si piensa que estos problemas están afectando su vida cotidiana, o la vida de alguien que conoce, debe hablar con su médico, o animarlo a hablar con ellos. Para hacer un diagnóstico y un tratamiento del alzheimer oportuno. Los primeros síntomas más comunes de demencia son:

  • Pérdida de la memoria: La disminución de la memoria, especialmente la de corto plazo, es el síntoma inicial más común del alzheimer. Quienes tienen olvidos todavía pueden recordar otros hechos asociados con la cosa se les ha olvidado.

Por ejemplo, pueden olvidar brevemente el nombre de su vecino de al lado, pero todavía conocer a la persona que está hablando a su vecino de al lado. Una persona con demencia no sólo olvida el nombre de su vecino, sino también el contexto.

  • Dificultad para realizar tareas familiares: Las personas con demencia a menudo tienen dificultades para completar las tareas diarias que son tan familiares que normalmente no se piensa cómo hacerlas. Una persona con alzheimer puede no saber en qué orden ponerse la ropa o los pasos para la preparación de una comida.
  • Problemas con el lenguaje: De vez en cuando todo el mundo tiene problemas para encontrar la palabra adecuada, pero una persona con demencia a menudo se olvida de palabras simples o sustitutos de palabras inusuales, por lo que el habla o la escritura es difícil de entender.
  • Desorientación en tiempo y lugar: A veces se olvida el día de la semana o hacia dónde se va, pero las personas con demencia pueden perderse en lugares conocidos, como el camino en el que viven, olvidar dónde están y cómo llegaron allí, y no se sabe cómo volver a casa. Una persona con síntomas tempranos de alzheimer también puede confundir a la noche y el día.
  • Disminución de juicio: Pueden vestirse inapropiadamente, usar varias capas de ropa en un día cálido o muy pocos en un día frío.
  • Problemas con el seguimiento de las cosas: Puede tener dificultades para seguir una conversación o mantenerse al día con el pago de sus facturas.
  • Perder las cosas: Cualquiera puede extraviar temporalmente su billetera o las llaves. Una persona con alzheimer puede poner las cosas en lugares inusuales, tales como una plancha en el refrigerador o un reloj de pulsera en la azucarera.
  • Cambios de humor o comportamiento: Todo el mundo puede llegar a estar triste o de mal humor de vez en cuando. Una persona con demencia puede llegar a ser demasiado emocional y experimentar cambios de humor repentinos, sin razón aparente.
  • Cambios en la personalidad: Una persona con alzheimer puede parecer diferente de lo que es habitualmente y en formas que son difíciles de precisar. Puede convertirse en sospechoso, irritable, deprimido, apáticos o ansiosos y agitados, especialmente en situaciones en las que los problemas de memoria están ocasionando dificultades.
  • Pérdida de iniciativa: A veces se puede llegar a estar cansado de las tareas domésticas, las actividades empresariales, o las obligaciones sociales. Sin embargo, una persona con demencia puede volverse muy pasiva, sentarse frente al televisor durante horas, dormir más de lo habitual, o llegar a perder el interés en pasatiempos.

Si está experimentando cualquiera de estos síntomas o está preocupado por un amigo o familiar, visite a su médico y discuta sus preocupaciones para realizar el tratamiento del alzheimer porque es probable que esté enfrentando la enfermedad, pues son los anteriores los síntomas tempranos de la demencia y/o alzheimer.

Tratamiento del alzheimer y herenciaknow alzheimer

Hay unos pocos casos muy raros en que la enfermedad de Alzheimer se ejecuta en las familias. En estos casos hay un vínculo directo entre una mutación heredada en un gen y la aparición de la enfermedad. Estos tienden a ser los casos de «inicio temprano» sobre los que se podría poner el tratamiento del alzheimer.

En estos casos, la probabilidad de que los familiares cercanos (hermanos, hermanas e hijos) desarrollen la enfermedad es uno de cada dos. La mayoría de casos de Alzheimer no son del tipo que se transmite directamente de esta manera.

Si un miembro de la familia tiene una forma normal de la enfermedad, el riesgo para los parientes cercanos es alrededor de tres veces mayor que el riesgo de una persona de una edad similar que no tiene antecedentes familiares de la enfermedad. En estos casos, tener conocimiento del tratamiento del alzheimer es importante.

Se cree que en estos casos los genes de una persona pueden contribuir al desarrollo de la enfermedad pero no la causan directamente.

¿Existe un tratamiento del alzheimer?

Actualmente no existe cura para la enfermedad de Alzheimer o de la mayoría de otras causas de demencia. Tampoco se puede esperar una curación en un futuro próximo. Los investigadores todavía están en la etapa de desarrollo de fármacos que ralentizará la progresión de la enfermedad, al menos en algunos casos.

Funcionan como tratamiento del alzheimer más no como una cura. Los investigadores tampoco saben cómo prevenir la enfermedad, cómo detener su progresión, o la forma de revertir sus efectos.

Se espera que más investigaciones sobre las causas de la demencia hagan que el tratamiento del alzheimer eficaz sea posible.

Aunque no hay medicamentos que pueden curar la enfermedad de Alzheimer, existe el tratamiento del alzheimer con medicamentos que pueden ayudar a algunas personas con la enfermedad. Los tratamientos actualmente disponibles pueden retrasar la progresión de la enfermedad en algunos casos por períodos de entre 6 y 18 meses.