¿Adiós al turismo de borrachera?

En Lloret quieren decir basta. El Ayuntamiento aprobó, un paquete de medidas para mejorar la seguridad ciudadana, la calidad y la imagen turística de Lloret, que todavía está ligada al turismo de borrachera.

El regidor de turismo del municipio, hacía la siguiente reflexión a la agencia ACN: «Los hechos de este verano nos tienen que servir como punto de inflexión y de no regreso para encarar el turismo de otro modo, porque hay cosas que no se han hecho del todo bien«. El regidor criticó duramente «varios operadores turísticos«, sin decir nombres, «sobre todo extranjeros, que venden que a la población todo se vale«.

Es una crítica compartida por otras administraciones municipales, en Cataluña y en Baleares, que lamentan la imagen que dan algunas empresas extranjeras de nuestros municipios de costa.

Al pleno extraordinario de Lloret se aprobó un documento que recoge una serie de medidas para encarecer las sanciones para los incívicos y ser más exigentes en el cumplimiento de la normativa. Es un intento para frenar el turismo de borrachera y una iniciativa que busca mejorar la calidad turística de esta población que ha sido estigmatizada durante mucho tiempo.

Además Lloret pedirá la colaboración de la Generalitat para sancionar los operadores turísticos que ofrezcan una imagen de la población en que sólo se potencie la fiesta y el alcohol. El camino a seguir es similar al que ha recorrido Calella, un municipio que históricamente había sufrido el turismo de borrachera y que, en cambio, ha tenido un verano tranquilo y sin incidentes.

Cómo se lo han hecho? Muchos lo vinculan a la desaparición de la Calella Fest, una fiesta de fin de curso para universitarios británicos que acababa muy a menudo con disturbios a las calles y molestias a los vecinos y en los hoteles. Y también lo vinculan a la diversificación de la oferta, para atraer diferentes tipos de visitantes. El teniente de alcalde, dijo ayer que consideran «totalmente erradicado el turismo enfocado al ocio nocturno» y que ahora están apostando para ser un destino de referencia para el turismo deportivo.

Optar por la calidad

El director del Patronato de Turismo Costa Brava – Girona, quiere «un endurecimiento de las normativas» para acabar con los disturbios que muchas veces genera el turismo de borrachera. Además pide a los empresarios del sector que opten por el turismo de calidad y «rompan todos los contactos con los turoperadores que traen estos turistas de borrachera aquí». Y es contundente: «A la Costa Brava tenemos que marginar todos los empresarios que sólo quieren hacer caja y a quién es igual quién viene«. Su fórmula pasa porque tanto la administración como los empresarios hagan «los deberes, por ejemplo en cuanto a infraestructuras y seguridad».

Es una fórmula que se podría aplicar a otras poblaciones donde el turismo de borrachera causa problemas. A las Baleares hay zonas donde cada día de verano hay disturbios derivados de este tipo de turismo. Punta Ballena, a Magaluf, es un ejemplo. O algunos puntos de Sant Antoni, en Ibiza. Hay visitantes que confiesan no salir de estos reductos turísticos en toda una semana y aseguran que los grandes descubrimientos que han hecho son los oxyshots , un vaso de alcohol evaporizado que el Gobierno Balear acaba de prohibir, y el gas de la risa, óxido nitroso, que se inhala mediante un globo y que provoca un ataque de risa descontrolado.

La mayoría de empresarios y la administración recuerdan que ya hace años que se está haciendo mucho trabajo y que los turistas de borrachera son una minoría. Pero la minoría continúa siendo muy ruidosa.